La retina es una capa interna de nervios dentro de nuestro ojo, la cual percibe la luz y las imágenes, y las envía al cerebro. El retinoblastoma es un tipo de cáncer que ocurre cuando las células nerviosas de la retina presentan mutaciones genéticas. Esta enfermedad afecta en su mayoría a niños menores de seis años de edad y se detecta con mayor frecuencia entre el primer y el segundo año de vida.
Síntomas del cáncer de retina
En la mayoría de los casos, el cáncer es curable si se detecta a tiempo. Por eso, es sumamente importante conocer los síntomas del cáncer infantil. El síntoma más común del retinoblastoma es una tonalidad blanca en la pupila que incrementa cuando una luz es proyectada al ojo. La luz puede ser de una fotografía con flash.
Otros síntomas y señales del retinoblastoma incluyen:
- Ojos que parecen ver en direcciones opuestas.
- Inflamación de ojos.
- Ojos rojos.
- Retos de visión.
Problemas de visión a causa del cáncer de retina, pueden ocasionar que el niño tenga caidas con frecuencia, choque contra cosas o tenga problemas para trasladarse en casa. La detección temprana de retinoblastoma es importante para evitar mayores complicaciones como ceguera y la diseminación del cáncer fuera del ojo.
Si tienes dudas, o si tu hijo presenta uno o más síntomas, ¡acude con tu médico especialista de confianza!