Ha llegado el momento de regresar a la escuela junto con la emoción de elegir una mochila para todo el año, entre tantos colores, formas, dibujos y estampados diferentes. Sin embargo, hay cosas que debes tener en cuenta a la hora de elegir una mochila para asegurarte de que tu hijo o hija no sufra dolores de espalda, hombros o cuello a lo largo del año. A continuación, te compartimos algunos consejos para el uso adecuado de la mochila:
1. Elige el tamaño de mochila y la posición adecuados para tu hijo o hija.
Una mochila debe tener, como máximo, el tamaño de la espalda. Además, debe descansar uniformemente en el centro de ésta. Las dos correas de los hombros deben estar lo suficientemente sueltas para poder ponerse y quitarse la mochila sin dificultad y permitir el movimiento de los brazos. Las correas no deben estar tan sueltas que la mochila descienda por debajo de la parte baja de la espalda y descanse sobre el trasero. Si dispone de ellas, utiliza las correas del pecho y de la cintura para una sujeción adicional.
2. Utiliza las dos correas.
Usar una sola correa hace que solo un lado del cuerpo soporte todo el peso de la mochila. Llevar las dos correas distribuye uniformemente el peso.
3. Aligera la carga para tu hijo o hija.
Asegúrate de que la mochila pese menos del 10-15% del peso de tu hijo o hija. Haz que lleve sólo los artículos necesarios para ese día. Organiza todo el contenido de la mochila, colocando los objetos más pesados cerca de su espalda.
Consulta a su pediatra o fisioterapeuta si su hijo o hija se queja de dolor de cuello, hombros o espalda, que tú creas que puede estar relacionado con una mochila mal ajustada.
Seleccionar la mochila adecuada también es esencial para los usuarios de sillas de ruedas. Te compartimos algunos consejos a tener en cuenta durante las compras de esta temporada:
4. Elige la mochila del tamaño y la posición adecuados para tu hijo o hija.
Asegúrate de que la mochila es lo suficientemente pequeña para caber en la parte trasera de la silla de ruedas. Ninguna parte, incluidas las correas, debe tocar las ruedas. Las dos correas de los hombros deben estar en cada asa de empuje de la silla de ruedas (si es que la tiene).
5. Aligera la carga de tu hijo o hija.
Una mochila pesada puede aumentar las posibilidades de que la silla de ruedas vuelque hacia atrás. También puede dificultar la propulsión de ésta, causando que tu hijo o hija gaste más energía a lo largo del día.
Consulta a su fisioterapeuta para saber cuál es la posición más óptima de la mochila en su silla de ruedas.