Llega un momento en el que ser adulto implica estar ocupado todo el tiempo. Entre el trabajo, las tareas del hogar, relaciones, actividades e imprevistos, tener tiempo para uno mismo puede resultar prácticamente imposible, a menos de que sea agendado con anterioridad.
Para algunas personas, el tomarse tiempo para ellos mismos produce sentimientos de culpa, egoísmo o de ser poco productivos. Sin embargo, es esencial que a lo largo del día encontremos tiempo para nosotros, especialmente si tenemos un rol de cuidadores. El autocuidado debe ser una prioridad para que entonces, podamos cuidar de los demás. Dicen por ahí que no podemos dar aquello que no tenemos.
Tómate cinco minutos para sentarte y respirar hondo. Inhala y exhala. Estira tus brazos y piernas, mueve los dedos de tus pies, tus muñecas y suelta. Algo tan sencillo como esto, puede hacer la diferencia en tu día. El internet está lleno de ideas y actividades para relajarte y des-estresarte. Aquí te dejo algunas:
- Da una vuelta caminando en tu cuadra o en tu casa
- Utiliza tu teléfono para tomar fotos afuera
- Haz respiraciones profundas
- Haz estiramientos/ejercítate
- Llama a un amigo(a)
- Escucha música
- Lee un libro u hojea una revista
- Haz un diario o escribe tus pensamientos
- Ríete -aunque sea sin motivo
- Haz una manualidad -pintar, dibujar, joyería, costura, carpintería, etc.
No todas las actividades serán atractivas para todas las personas, pero intenta algunas y ve cual es la que mejor te funciona. Lo importante es que hagas tiempo para ti.