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Cómo usar libros para promover habilidades de comunicación

Independientemente de que su hijo tenga o no una discapacidad, la lectura y la narración de cuentos es una forma fundamental para ayudarlo a desarrollar habilidades del habla y del lenguaje.

Usamos libros y cuentos con los niños para ayudarles a promover el desarrollo del cerebro, enseñarles el lenguaje y las emociones, despertar su curiosidad y motivarlos a usar su imaginación.

El libro que elija leer no es tan importante como la forma en que se lo lee a su hijo. Algunos libros tienen muchas palabras y algunos otros no tienen ninguna. Siéntase libre de leerle, pero también recuerde interactuar con él durante la actividad de lectura.

Puede interactuar señalando objetos y personajes haciendo preguntas sobre lo que hacen, describiendo imágenes en el libro, llamando la atención sobre colores, acciones, emociones, animales o personas. Esto le ayudará a su hijo a desarrollar un vocabulario sólido ya que, los niños son aprendices visuales y auditivos.

Leer cada palabra del libro es una opción, pero no es necesario para involucrar a su hijo en una experiencia de aprendizaje rica en lenguaje. Los libros que incluyen canciones, rimas y repeticiones son una excelente manera de involucrar a su hijo en la historia. Pídale que repita frases comunes, canten juntos y hagan rimas a lo largo de la historia para mantenerlo interesado.

Comprendiendo el rompecabezas del Autismo

El Autismo, o Trastorno del Espectro Autista (TEA), se refiere a un grupo de condiciones que causan dificultades en las habilidades sociales, los comportamientos repetitivos, el habla y la comunicación no verbal. En conjunto, el TEA se compone de las siguientes condiciones: trastorno autista, trastorno generalizado del desarrollo no especificado (PDD-NOS, por sus siglas en inglés) y síndrome de Asperger. El TEA es un diagnóstico común y, según el Centro para el Control de Enfermedades, actualmente afecta a 1 de cada 54 niños en los Estados Unidos.

Comúnmente, el Autismo se diagnostica entre los 2 y 3 años de edad y se basa en el comportamiento y desarrollo. Cada niño diagnosticado con autismo demuestra diferentes fortalezas y debilidades, sin embargo, los signos y síntomas más comunes incluyen:

  • Retos en las habilidades sociales, emocionales y de comunicación
  • Evitar el contacto visual
  • Repetición constante de acciones
  • Dificultad para adaptarse al cambio
  • Fijación a determinados objetos
  • Sensibilidad a la luz, el sonido y el tacto

El tratamiento para el TEA depende del niño, sus síntomas y sus retrasos en el desarrollo. Los niños pueden beneficiarse de todos los servicios de terapia o pueden necesitar más atención en un área que en otra.